TRIMESTRE MISIONERO

El Domund da un colorido especial, cada año, al mes de octubre. La Iglesia misionera se hace presente y visible en vallas publicitarias, medios de comunicación social, colegios, comunidades parroquiales y no parroquiales. La acción misionera de la Iglesia sensibiliza, nos hace más solidarios en la oración y en el compartir con los misioneros y hermanos allende los mares. Justo lo que nosotros hemos hecho en este mes en algunas parroquias donde comenzamos a trabajar los últimos años.

Las parroquias salmantinas de San Juan de Bardalos, María Mediadora, San Marcos y Dulce Nombre de María reiniciaron con ilusión y cierta añoranza las reuniones familiares en las casas. Se vivió y celebró la alegría del reencuentro al comienzo del nuevo curso. Igualmente también en Cazorla (Jaén) y Caniles (Granda).

La Parroquia de S. Antonio de Padua de Ponferrada (León) tuvo la misión parroquial en febrero de 2008. Continúa un número bueno de Asambleas. Apoyadas por el párroco se reúnen cada mes para orar y dialogar sobre temas de formación. La Semana del Padre Nuestro nos sirvió para profundizar en el rico contenido del mismo y el compromiso que conlleva hacerlo oración y vida. También para dar paso a otra etapa de formación y vivencia de la fe. Y, como no, para entusiasmarnos y tomar fuerzas para el próximo curso pastoral.

Molina de Segura (Murcia) ha sido otra ciudad que nos ha recibido en dos de sus parroquias: Sagrado Corazón y Ntra. Sra. de la Asunción. Ambas tuvieron la misión en 2004. En las dos reflexionamos sobre las Bienaventuranzas. Buena asistencia a las reuniones, con mucho interés. Son dos comunidades embarcadas en el proceso formativo cristiano, que siguen con entusiasmo y con el apoyo de sus párrocos. La celebración de las Bienaventuranzas nos llegó a todos.

El tercer terreno roturado por la Misión Redentorista fue la isla de Mallorca en 2006. Concretamente la Parroquia de San Miguel de Llucmajor. También aquí reflexionamos sobre las Bienaventuranzas, con complacencia y aceptación de un numeroso grupo de personas. Continúan el proceso misionero bastantes Asambleas Familiares Cristianas, que cuentan con el apoyo de la Comunidad de PP. Franciscanos de la TOR, y también de las dos comunidades de religiosas existentes en la parroquia.
También ha tenido lugar la Renovación de Misión en las parroquias de Campos, Ses Salines y Col. Sant Jordi; también en Mallorca.

Estos contactos misioneros son positivos para las parroquias. Para los misoneros son motivadores porque nos hacen ver la validez y actualidad del proceso de Misión Parroquial que puede llegar a tener una duración de hasta 10 años.

Las próximas semanas tenemos misión en la Parr. de los Mártires de Uganda de Pamplona y en seis parroquias del Concello de Coristanco en A Coruña.

Confiamos en el Dueño de la mies y en su Espíritu. Le pedimos que estas comunidades continúen creciendo y siendo cada día más misioneras.

Que el Señor y la Virgen del Perpetuo Socorro sigan acompañándonos en la tarea evangelizadora.

P. Juan Antonio G. Terrón